A veces me da miedo
dormir. Entonces, voy posponiendo la hora en la que el sueño llega, como si
fuera una necesidad inútil de la que pudiera prescindir, entretenendo al tiempo
sin usarlo en nada, solo por asi esquivar al sueño traicionero que refleja al
subconsciente. Cuando se cierran los ojos atacan los demonios, y estos se me
van sumando a los costados.
