Jornadas de Farsantes

se dan las vacaciones de su vida a nuestra costa,

y dentro de 2 días olvidaran que tienen dios.

ríen, follan, beben en el nombre del señor

¡y que brinden por nosotros!, la cuenta va al español.

tienen toda permisión,

pues su traje de amarillo

les protege de ninguna acusación.

y besemosles los pies mientras mean nuestras fuentes,

limpiemosela después ¡y cuidado con los dientes!

menos mal que aún nos queda nuestra amable policía

para ayudar a doblar nuestras rodillas

ante los que Joden Maman Joden

en el nombre del señor.

Y ese es el error de las parejas

en un capricho a la belleza, quien fascina,
y el misterio del hombre por conocer,
se chispean en los labios las miradas
y en el palpito y el nervio de ceder.
nacen las llamas y queman las almas
en pasiones e incendios por verter
y ausenta el sueño y falta al ansia
el apetito ya saciado de su miel.


tras la lluvia, luchan brasas por lucir
la rutina a absorbido tu vivir
el misterio se descubre
y las almas se entrelazan
y se olvida el anudado como fin.


se confía a la esperanza,
y se sigue y se avanza
y confiados se descuidan ataduras
y se hielan y se rompen ligaduras
y se sigue aun al lado por seguir.
estómagos llenos de alimentos
y sueños ya dormidos y cubiertos.

todo es explicable con la calma necesaria

he sentido en ti el ansia de quebrar mi tranquilidad, para culpar a otros por tus fallos cometidos. yo no he pactado nada con cupido, ni he trastocado mundos ni os he cosido hilos. las realidades entran por los ojos, fluyen por la mente se abrazan allí a su manera y luego brotan de mis manos.
que he sido yo la que, tras ser suplicada de amor, he mirado hacia otro lado; que he sido yo, quien, tras decir un "te quiero" ha besado a otros labios, simplemente porque esos otros sonaran mas a verso y menos a realidad. que con esto solo he camuflado mis errores, haciéndolos pronunciar por otros labios. y con esta confesión podría ahora mismo perder a la persona a la que amo, pues con ella, desvelo mis fallos.
que de la observacion de un amor semiquebrado, resguardado en la esperanza de la constante reconciliación, haya arrastrado mi materia y por ello predicho los conflictos, no era en absoluto, parte de mi intención. Porque al fin y al cabo, de una u otra forma, todos los artistas escriben siempre de lo mismo:ellos mismos, y esta vez no era una excepción. Perdón por todo posible malentendido.

Gravemente

estoy gravemente enferma.
tengo temblores, falta de sueño, perdida de apetito... a veces, de pronto, el corazón se me acelera y me cuesta respirar, sintiendo una fuerte presión en el pecho. a veces, empalidezco de tal modo que me asemejo a una estatua de alabastro.

pierdo la memoria y mi cabeza se escapa, olvido pequeños detalles importantes, cambio las cosas de sitio sin querer y no escucho cuando me hablan.
estoy gravemente enferma.
algunos médicos lo niegan, otros me toman por loca, pero lo cierto es que a veces mi cabeza se pierde, la tristeza me inunda y la angustia me ahoga. los pocos médicos que no me han sabido hipocondriaca solo dicen que no queda otra que esperar. no tienen un nombre para esto, tampoco medicamentos, solo puede ser curado por el tiempo.
¿sera un mes? ¿un año? ¿dos?
estoy enferma, gravemente enferma, y tu, solo tu eres el único causante.
mátete la culpa y mi desdén, que desde que me enfermaste me faltan el sueño y hambre y me siento ridícula y desnuda ante tu ser.
estoy enferma, gravemente.





"eres tu el culpable de este juego sangriento"

Hadas verdes y elefantes rosas

A veces parece que la vida se ríe de uno mismo.
El alcohol nos hace tropezar y caer
En los más horribles pozos
Perdiéndose la dignidad y las vergüenzas.

Nepente que nos vuelve a las formas primitivas
Mostrándonos sin miedos, sin prejuicios, con agallas
Acentuando las pasiones de las almas:
Y el triste llora, y el loco ríe,
Feliz es el que sobra de envidiar,
Y las almas solitarias siéntense pinchar de soledad.

Y el bálsamo "ahogador de penas", trajo más;
Y te hizo resbalar de tu alto pedestal
A mis pies, arrodillado
Sin prejuicios y sin miedos;

Veo en tus ojos a un cachorro abandonado
Que con su ruda aspereza,
Carcomido por temores,
Nunca se dejara amar
A no ser que se resbale su coraza en los fluidos
Vaporosos, liberantes de la soltura y el mal,
Guiador a los olvidos.

Es curioso cuantas veces has volado a mis sueños y a mis mundos,
Y ahora, desde arriba, te me antojas ínfimo y absurdo.
Solo eres uno más de tantos otros;
Perdido, solo, humano y roto,
Con un tremendo vacio que llenar
Y que ahueca la exigencia y la arrogancia
Del que lleva los zapatos de Papá.